Los higos de Gredos serán los primeros en España en estar amparados y certificados
Años de intenso trabajo han confluido en un proyecto cuyo objetivo es dotar de valor añadido al higo de la comarca del Valle del Tiétar, en el sur de la provincia de Ávila, a través de la creación de una figura de calidad agroalimentaria, como es la Indicación Geográfica Protegida IGP, que certifique la calidad de este producto.
El cultivo de la higuera es un cultivo típico de esta comarca al abrigo de la Sierra de Gredos, que en los últimos tiempos se ha estado enfrentando a una paulatina disminución de la superficie de plantación y a una acusada falta de profesionalización en su comercialización. Aunque actualmente su cultivo se está orientando más a la producción de higos frescos y se han reactivado nuevos terrenos que necesitan riegos más abundantes y podas en horizontal para facilitar la recogida de los frutos. Con todo, la producción fluctúa en función de las condiciones climáticas de cada temporada.
Este fruto se cultiva en casi toda la comarca el Valle del Tiétar. Los principales núcleos de producción se encuentran en Candeleda, Poyales de Hoyo y El Raso, existiendo producciones también en Arenas de San Pedro, Gavilanes, Mijares y Sotillo de la Adrada. Los higos frescos predominan en el Barranco de las Cinco Villas, Guisando y El Hornillo, mientras que los higos secos en Pedro Bernardo, Mijares y Gavilanes.
La producción total de higo en la comarca está en torno a los 2 millones de kilos, proporcionando unos ingresos cercanos a los 2 millones de euros. El número de explotaciones supera el millar, siendo generalmente muy pequeñas. Aunque en los últimos diez años se han hecho algunas plantaciones más grandes y especializadas.
La mayoría de los productores están agrupados en cooperativas, existiendo un total de 4, Cooperativa San Pedro Bautista (San Esteban del Valle), Cooperativa San Isidro (Pedro Bernardo), Cooperativa Capra Hispánica (El Raso-Candeleda) y Cooperativa Gredosur, está última de segundo grado, las cuales han impuesto una mayor profesionalización en los procesos de elaboración y comercialización.
Los higos frescos se venden principalmente en los mercados de Madrid y la mitad norte del país, mientras los secos tienen un mercado algo más amplio, pero también nacional. Los higos secos se comercializan más fácilmente, ya que son los que más duran para el envasado. Solo parte de la producción es transformada en Ávila, el resto lo compran empresas de Alicante, Barcelona, Huesca, Málaga, Valladolid y Badajoz.
La variedad dominante en esta comarca es la variedad Cuello de Dama, que presenta doble aptitud, tanto en fresco como seco. Es una variedad bífera, con una producción baja de brevas y muy alta de higos. Éstos son de tamaño medio, forma esférica y color verde amarillento. La pulpa es de color ámbar y su calidad organoléptica excelente. La piel es gruesa, elástica y resistente y su calibre de gran tamaño.
Los datos de consumo demuestran que existe un importante nicho de mercado tanto para el higo fresco como para el higo seco, tanto a nivel nacional como internacional. Aunque España, a pesar de su tradición en el cultivo y de sus niveles de producción, no está aprovechando ni de lejos esta oportunidad comercial.
La Marca de Garantía Higo de Gredos se convertirá en la primera figura de calidad agroalimentaria española que ampare y certifique la calidad del higo. Un pequeño, pero necesario paso, para la mejor protección, difusión y comercialización de este fruto con tantas posibilidades.
Fuente: Análisis para la comercialización de los higos amparados bajo la futura marca de garantía Higo de Gredos, por Gemma Rodríguez López, de la Universidad Católica de Ávila
Vía: HIGOS&FIGS